domingo, 14 de noviembre de 2010

UNA NUEVA VIDA

Hoy es un día sumamente importante no sólo para mi sino para todos los familiares y amigos de Osmel y Adriana. Hoy Dios, Nuestro SeÑor, abrió las ventanas de los cielos y derramó todas sus bendiciones con el nacimiento de RYAN, un pequeñín de 20 pulgadas de largo y 8.04 libras, que llegó con los ojos abiertos para ver a sus abuelas y padres amandole desde Ya.
Ryan es el hijo de My Boy, aquel que fue tan inquieto y travieso, tan tierno y cariñoso que a partir de hoy aprenderá a ser padre y estoy segura que será el mejor.
GRACIAS SEÑOR POR ESTA GRAN BENDICION!!!!!!!!!!
Y QUE DIOS LE TENGA SIEMPRE EN LA PALMA DE SU MANO.

70 Años

  Arribo a la década siete siete escalones del aprendizaje siete mares recorridos siete.   Y setenta son muchos, o quizás son tan pocos porq...