Fecha en que familia y amigos se reúnen a
compartir con alegría, los une la diversión y el regocijo de estar unidos
deleitando deliciosas comidas y la oportunidad de recibir regalos y
ver cumplidos algunos de sus deseos; pero como ya se sabe el verdadero motivo
de la ocasión es el nacimiento del Mesías, el Rey de reyes, el Salvador: Jesús.
Este año en que, por las razones que sean nuestro país
se encuentra dividido y convulsionado, socialmente hablando, este año como
otros tantos años en al menos la última década, la fecha se aleja cada vez más
de su verdadero propósito, y yo quiero hacer una plegaria:
Señor, Dios todopoderoso
Señor Dios que con tanta ternura
diste vida a tus hijos.
Únenos, únenos
en un abrazo de buena voluntad.
Que cada hombre, mujer o niño
sienta que, un hilo invisible
nos conecta al centro del Universo
donde radica el AMOR.
Si no podemos amar al vecino, al desconocido o al
hermano,
al menos que la reserva de tolerancia en nuestros
corazones
nos permita aceptar cada vida con sus propias decisiones
que respetemos y seamos respetados;
sólo así viviremos en paz.
Paz necesita el mundo
y paz te pedimos Señor
Ilumina nuestros corazones y mentes
para reafirmar lo que dijo Lucas: (2:14)
“Gloria a Dios en los cielos y en la tierra paz y buena
voluntad entre los hombres”
¡Feliz Navidad y lluvia de bendiciones para el año
2018!